El impacto de la prohibición del maíz transgénico en las inversiones y empresas en México

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La Cámara de Diputados de México aprobó una reforma constitucional que prohíbe el cultivo de maíz transgénico en el país este 25 de febrero de 2025. Con 382 votos a favor y 88 en contra, esta  reforma establece que el maíz nativo es un elemento de identidad nacional, prohibiendo la siembra de organismos genéticamente modificados (OGM) y priorizando la biodiversidad, la soberanía alimentaria y los conocimientos tradicionales.

Esta decisión llega en un momento en el que las inversiones en biotecnología agrícola han tomado gran relevancia en el mundo y cuando empresas como Bayer han apostado fuertemente por innovaciones en el mejoramiento genético del maíz. Sin embargo, el cierre definitivo del mercado mexicano a estos productos obliga a las compañías a replantear sus estrategias y evaluar las consecuencias económicas y comerciales de la medida.


México: un mercado clave que cierra sus puertas al maíz transgénico

A pesar de la prohibición, México aún es un mercado clave para empresas como Bayer, que en 2020 presentó su tecnología Vitala, una innovación desarrollada por investigadores mexicanos para mejorar el rendimiento del maíz sin modificaciones genéticas. Con esta y otras iniciativas, la compañía ha tratado de mantenerse en el mercado mexicano, uno de sus diez principales a nivel global.

Sin embargo, la prohibición del maíz transgénico representa un desafío para la industria biotecnológica y agroempresarial, ya que muchas inversiones en investigación y desarrollo se verán limitadas en el país. Ahora, al no poder comercializar semillas transgénicas en México, estas compañías podrían redirigir sus inversiones hacia países con regulaciones más flexibles, como Argentina y Brasil.


Implicaciones económicas y comerciales

El maíz es un pilar fundamental de la economía mexicana, no solo por su importancia en la alimentación, también por su impacto en la industria agroalimentaria y en el comercio con Estados Unidos. Aunque México es autosuficiente en maíz blanco, utilizado principalmente para la producción de tortillas, depende de la importación de maíz amarillo para la producción de alimentos industrializados y alimentación del ganado. En 2024, Estados Unidos exportó más del 40% de su maíz amarillo a México, con un valor de 4,700 millones de dólares.

La decisión del Gobierno mexicano podría generar complicaciones comerciales con Estados Unidos y Canadá, socios en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC). En diciembre de 2024, un panel internacional determinó que México no logró demostrar con base científica que el maíz transgénico representa riesgos para la salud, por lo que ordenó el levantamiento de las restricciones a la importación de estos productos. Sin embargo, con la nueva reforma constitucional, México mantiene su postura de evitar el cultivo de estos granos dentro de su territorio.


El papel de la innovación tecnológica y el futuro del sector agroindustrial

La decisión de prohibir el maíz transgénico ha generado un debate entre los sectores científico, agroindustrial y gubernamental. Mientras que el Gobierno mexicano argumenta que la medida protege la biodiversidad y el patrimonio cultural del país, los sectores empresarial y académico destacan que la biotecnología ha demostrado ser una herramienta clave para mejorar los rendimientos agrícolas y hacer frente al cambio climático.

Empresas como Bayer han desarrollado maíz de baja estatura y resistencia a sequías a través de métodos convencionales, pero muchas de las innovaciones en el sector dependen de la biotecnología y la modificación genética. Con la prohibición, se podría limitar el acceso de los agricultores mexicanos a tecnologías que les permitirían competir en el mercado global.


¿Cuál es el impacto para la inversión extranjera y la competitividad?

Las empresas agrobiotecnológicas que operan en México podrían enfrentar una reducción en la inversión y una reorientación de sus recursos hacia otros mercados. La investigación en cultivos genéticamente modificados requiere altos costos de desarrollo, y sin un mercado viable en México, estas compañías podrían priorizar proyectos en países con regulaciones más permisivas.

La prohibición del cultivo de maíz transgénico en México representa un parteaguas para la industria agroalimentaria y biotecnológica. Si bien la medida busca proteger la biodiversidad y la identidad cultural del país, también podría limitar la innovación tecnológica y afectar la competitividad de los agricultores mexicanos. 


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El futuro del sector dependerá de cómo evolucionen las relaciones comerciales con Estados Unidos y Canadá. También, en la capacidad de la industria para adaptarse a nuevas condiciones regulatorias. Mientras tanto, la prohibición podría traducirse en una oportunidad para el desarrollo de tecnologías alternativas que permitan aumentar la productividad sin depender de modificaciones genéticas. La decisión final del Senado definirá el rumbo de la agricultura en México en los próximos años.


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Con información de El País y Expansión

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Autor: WORTEV Staff

Fecha: 27 febrero, 2025

Título: El impacto de la prohibición del maíz transgénico en las inversiones y empresas en México

Medio: WORTEV Academy

URL: https://academy.wortev.com:443/noticias/maiz-transgenico/